viernes, diciembre 30, 2005

Navidad...


Para mi cada año mientras he ido creciendo, especialmente estos últimos, me siento mas alejado de la navidad, de esa navidad de películas como "mi pobre angelito" o esas notables historias tiernas de niños y niñas que encuentran su felicidad y la complacencia a sus lindas peticiones en un viejito de barbas grandes y estomago ancho de color rojo que se hace llamar Santa Claus, porque obviamente él es de hollywood y por esto cumple los deseos mas fantásticos que existen, desde juntar a sus papas hasta curar a su abuelo de cáncer. Quizás mi desencanto con la "Feliz Navidad" sea porque, como ya dije, he crecido y de cierta manera uno va observando la realidad, esa realidad que te dice no todos los niños tendrán regalo esta noche, que para muchos niños será como cualquier noche y que existen niños en donde simplemente no existe esa navidad y que el viejo pascuero o Santa Claus es un gordo hediondo que se para en la esquina como ellos a pedir dinero para poder comer. Siguiendo con esto, si tomamos en cuenta a todos los niños del mundo, porque en su idea original esto es para los niños, en noche buena solo la mitad recibirán algún regalo. Solo la mitad!!! Entonces lo comparo con mi realidad y me pongo a contar con una simple matemática que de diez niños que conozco, esos juguetones del barrio, amigos de mis primos chicos o hijos de amigos, solo la mitad tendrían algún paquete que abrir y solo dos de ellos algún regalo de los que promociona el viejo pascuero de fallabella en la televisión, cuando el resto con suerte tendrá alguna tarjeta o algo que comer. Que dura realidad. Y para los incrédulos, que nunca faltan, es cosa de ir a Correos de Chile y ver cuantas cartas escriben los niños de nuestro país al viejito pascuero solicitando un juguete o algún regalo pequeño, es mas, pues quizás estos niños estén mas cerca de nosotros de lo que pensamos. Mas ironía y rabia siento, al ver y saber lo que gastan las personas en satisfacer las exigencias ridículas de un pequeño futuro consumista que lo único que necesita para ser feliz, aunque el no lo sepa, es amor, cariño y comprensión y alguien que se preocupe realmente de él.

Ahora, ¿que es navidad entonces?, Cuando ya no quiero recibir regalos por vergüenza, porque conozco mas de la realidad, la verdadera realidad que existe, aquí a diez cuadras de mi casa, o incluso menos.

Bueno, debo reconocer que soy culpable de todo esto, pues no hago mucho para evitarlo y me escudo en que esta historia me queda grande y todo lo demás que decimos cuando no somos lo suficientemente valientes o dedicados para tomar alguna determinación frente a algún problema que vivimos a diario. Reconozco también que aparte de deprimirme en el sentido más superficial de la palabra, no hago nada por cambiarlo, al igual que mis amigos y compañeros cuando mas de alguna vez hemos coincidido en todo esto, y año tras año lo seguimos haciendo para volver a plantearlo en alguna conversación "adoc" a estas fechas, "algo mas profunda" con mas de algún copete en el cuerpo.

¿Quedara reencontrar a la navidad como un momento familiar?, por lo menos para compartir y conversar cosas graciosas, hablar de el futuro y dar abrazos, no lo se, solo espero no dormirme en los laureles.


by Janko